Corning otorga concesiones sobre Gorilla Glass para evitar la multa de la UE

Desde que el iPhone revolucionó los smartphones a partir de 2007, el cristal resistente a los impactos más popular del mercado es el Gorilla Glass de Corning, una posición dominante sobre la que la Comisión Europea ya ha iniciado una investigación: ahora el fabricante neoyorquino presenta compromisos y concesiones para cerrar el investigación y evitar una posible megamulta en la UE.

Te recordamos que las acusaciones planteadas por la autoridad antimonopolio de la UE incluyen acuerdos de suministro exclusivo tanto con fabricantes de teléfonos inteligentes como con terceras empresas que terminan el vidrio en bruto. El resultado es la limitación de la entrada de competidores al mercado, penalizando los precios y los usuarios finales.

Corning acepta renunciar a todas las disposiciones de exclusividad y ya no exigir a los clientes que compren cantidades específicas de material. Entre las soluciones propuestas por Corning se encuentra también la de intervenir legalmente sólo en caso de violación de las patentes de propiedad del vidrio irrompible y no en caso de incumplimiento de contrato.

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Las partes interesadas tienen seis semanas para impugnar los compromisos propuestos por Corning: estos último puede sufrir cambios antes de ser aceptado por la UE. En caso de que la empresa no respete sus compromisos, se arriesga a una megamulta de hasta el 10% de la facturación global, multa que en el caso de Corning para el año 2023 ascendería aproximadamente a 1,250 millones de dólares.

Sin embargo, si los compromisos de Corning satisfacen las normas antimonopolio de la UE, la empresa tendrá que respetarlos y mantenerlos durante al menos nueve años, siempre bajo la observación de la UE para garantizar su aplicación continua. Las imágenes de este artículo son de Corning.

Desde hace algún tiempo los principales gigantes tecnológicos están bajo la atención de los organismos antimonopolio de varios países del mundo: el caso más sonado es la acusación de monopolio de Google en EE.UU. con la consiguiente petición de escindir Chrome y quizás también Android.